Este miércoles se realizó el segundo día consecutivo y quinta votación para elegir al presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos.
El líder de los legisladores republicanos, Kevin McCarthy, no ha logrado alcanzar su tan esperada victoria.
Por quinta vez, los republicanos nominaron a McCarthy como su presidente, después de que la cuarta votación mostró a 20 reticentes conservadores que aún se negaban en apoyarlo, sin cambios desde la vez anterior. McCarthy no alcanzó los 218 votos que normalmente se necesitan para ganar la presidencia.
Sin embargo, McCarthy se ha comprometido a seguir luchando a pesar de perder las rondas de votación que también ha causado revuelo el día anterior entre los republicanos, quienes componen la nueva mayoría legislativa.
Este miércoles la dinámica no fue diferente a la jornada del martes. Los demócratas postularon a su líder, el representante Hakeem Jeffries, como presidente de la cámara. Un líder de la derecha del grupo conocido como Freedom Caucus ofreció una opción ante McCarthy, al nominar al representante Byron Donalds, republicano por Florida. Se trató de otro momento histórico, pues tanto Jeffries como Donalds son afrodescendientes.
“Este país necesita liderazgo”, aseguró el representante Chip Roy, republicano por Texas, quien recalcó que era la primera vez en la historia que dos estadounidenses de color eran nominados para el cargo. Legisladores de ambos partidos se pusieron de pie para aplaudir.
Fue la primera vez en 100 años que un candidato a la presidencia de la cámara baja no logra hacerse del cargo en la primera votación, pero McCarthy no pareció alterarse. En cambio, se comprometió a luchar hasta el final animado, según dijo, por el expresidente Donald Trump para que ponga fin al desorden y una al Partido Republicano.
Desde 1923, la elección de un orador no ha pasado por múltiples votaciones, y la lucha más larga y agotadora por el mazo comenzó a fines de 1855 y se prolongó durante dos meses, con 133 votaciones, durante los debates sobre la esclavitud en el período previo a la Guerra Civil.
Los demócratas nominaron con entusiasmo a Jeffries, quien asumirá el cargo de líder del partido, como su elección para orador. Obtuvo la mayor cantidad de votos en general, 212.
Es una estrategia que los expresidentes de la Cámara de Representantes, incluida la presidenta demócrata saliente Nancy Pelosi y el presidente republicano John Boehner, usaron cuando se enfrentaron a la oposición y ganaron el mazo con menos de 218 votos.