El día de sábado 1 de junio,, Nayib Bukele ha sido investido nuevamente como presidente de El Salvador, comenzando así su segundo mandato que se extenderá hasta 2029.
El acto se llevó a cabo en San Salvador y contó con la presencia de varios dignatarios internacionales. Entre los que destacaron el rey Felipe VI de España y los presidentes de Argentina, Javier Milei; Daniel Noboa de Ecuador, entre otros.
Por su parte la delegación de Estados Unidos fue encabezada por Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional, quien estuvo acompañado por otros altos funcionarios estadounidenses. Esta representación subraya el interés de Washington en mantener la cooperación en temas migratorios, a pesar de las críticas por la situación de los derechos humanos en El Salvador.
En su discurso, Bukele defendió fuertemente su gestión, especialmente en el área de seguridad, destacando los logros del Plan Control Territorial y el régimen de excepción, que según él, han llevado al país a estar cerca de “ganar la guerra contra las pandillas”. Resaltó que El Salvador ha estado fuera de la lista de los países más violentos del mundo durante tres años consecutivos.
Bukele también arremetió contra las críticas internacionales a su gobierno, afirmando que “El Salvador es un país libre, soberano e independiente”, y que no permitirá que fuerzas externas dicten sus políticas internas. Rechazó las acusaciones de autoritarismo, argumentando que su estilo de liderazgo es democrático.
Bukele, quien ganó las elecciones con un abrumador 86,4% de los votos, ha sido reconocido por su política de mano dura contra el crimen, aunque ha enfrentado críticas de diversas organizaciones de derechos humanos.
