El máximo tribunal mundial para crímenes de guerra ha emitido órdenes de arresto contra el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, su exministro de Defensa y el jefe militar de Hamás, acusándolos de crímenes contra la humanidad en relación con la guerra en Gaza que comenzó hace 13 meses.
En las órdenes se justifica que hay motivos para creer que Netanyahu y el exministro de Defensa, Yoav Gallant, han utilizado “el hambre como método de guerra” al restringir la ayuda humanitaria y han atacado intencionalmente a civiles en la campaña de Israel en Gaza, acusaciones que los funcionarios israelíes refutan.
La acción de la Corte Penal Internacional se produjo mientras el número de muertos por la campaña de Israel en Gaza superó las 44,000 personas, según autoridades sanitarias locales, quienes afirman que más de la mitad de los muertos eran mujeres y niños.
Expertos indican que el hambre se ha generalizado en Gaza y podría haber alcanzado niveles de inanición en el norte del territorio, que está bajo el asedio de las tropas israelíes. Israel dice que ha estado trabajando arduamente para mejorar la entrada de ayuda, aunque el flujo de suministros en Gaza sigue siendo casi el más bajo de la guerra.
Por su parte, Estados Unidos ha rechazado la decisión de la Corte Penal Internacional, manifestando “Estados Unidos rechaza fundamentalmente la decisión de la Corte de emitir órdenes de arresto contra altos funcionarios israelíes”, dijo un portavoz de la Casa Blanca.
El portavoz señaló que Estados Unidos está “profundamente preocupado” por la “precipitación” de la Fiscalía de la CPI, liderada por Karim Khan, para solicitar las órdenes de arresto, así como por los “errores procesales problemáticos que han llevado a esta decisión”.
“Estados Unidos ha dejado claro que la CPI no tiene jurisdicción sobre este asunto”, subrayó el portavoz.