“Es el momento de la mesura, la razón y la desescalada. No hay lugar para acciones y declaraciones que llevarían esta peligrosa situación al abismo”, dijo este miércoles el Secretario General de las Naciones Unidas a los Estados miembros de la Organización.
António Guterres se dirigió al pleno de la Asamblea General en una sesión especial del mayor órgano deliberativo sobre los últimos acontecimientos en Ucrania.
En ese foro, Guterres pidió un alto el fuego y llamó al diálogo y la negociación para evitar el sufrimiento de la guerra a Ucrania y los lugares donde el conflicto pudiera extenderse.
Del mismo modo, instó a todas las partes a valerse plenamente del Artículo 33 de la Carta de la ONU y de sus diversos instrumentos de solución pacífica de controversias.
El titular de la ONU manifestó gran preocupación por los reportes de violaciones del alto el fuego en la línea de contacto y el “riesgo real de una mayor escalada sobre el terreno”.
“La historia de este conflicto es compleja y sé que sus actores no se pondrán nunca de acuerdo”, apuntó, “pero una cosa está clara: la decisión de la Federación de Rusia de reconocer la llamada ‘independencia’ de las regiones de Donetsk y Luhansk, y las acciones que le han seguido, son violaciones de la integridad territorial y la soberanía de Ucrania y son incompatibles con los principios de la Carta de las Naciones Unidas”, puntualizó.
Principio inviolable
En este sentido, citó el principio de igualdad soberana de los Estados y recordó que la integridad territorial e independencia política son inviolables.
Guterres consideró que los Acuerdos de Minsk -diseñados para llegar a una solución pacífica en el conflicto del este de Ucrania y validados por la ONU- están agonizando pese a ser la vía a seguir.
Al aludir a las aseveraciones rusas de que las tropas que ha desplegado en Donetsk y Luhansk constituyen una operación de paz, recalcó que este tipo de misiones sólo tiene lugar “con el consentimiento del país anfitrión”.
Señaló también que los civiles, incluidas las mujeres y los niños, siempre son los primeros y más afectados en las guerras y advirtió que si el conflicto en Ucrania se expande, el mundo podría ser testigo de un nivel de grave necesidad que no se ha visto en muchos años.
En este sentido, llamó a todas las partes a ajustarse al derecho humanitario internacional permitiendo el acceso seguro e irrestricto de las agencias de asistencia, incluso a las áreas no controladas por el gobierno del este de Ucrania.
Antes de concluir, Guterres reiteró su compromiso firme de apoyar todos los esfuerzos para “resolver esta crisis sin más derramamiento de sangre”, ofreciendo sus buenos oficios.
“No podemos y no cejaremos en la búsqueda de una solución pacífica”, puntualizó el Secretario General.
Oportunidad a la paz
Por su parte, el presidente de la Asamblea General, primer orador de la sesión, afirmó que si algo le han enseñado al mundo los 76 años de existencia de la ONU es que “la paz duradera no se logra ni se sostiene con compromisos militares, sino a través de soluciones políticas”.
Abdulla Shahid llamó a los Estados miembros a “desplegar las herramientas que se tienen para resolver disputa, dar prioridad a la diplomacia, los buenos oficios y la mediación”.
“Démosle a la paz la oportunidad que merece”, enfatizó, exhortando a las partes a aumentar las negociaciones y reducir las tensiones por medio del diálogo.
“Las Naciones Unidas tienen como mandato, en el Artículo 1 de su Carta fundacional que las controversias o situaciones en las que pueda quebrantarse la paz sean resueltas por medios pacíficos y de conformidad con la justicia y los principios del derecho internacional”, acotó Shahid.
ONU/Evan SchneiderEl Secretario General, António Guterres, se dirige a la Asamblea General de la ONU sobre la situación en los territorios temporalmente ocupados de Ucrania.
Negación del derecho a existir
El ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, participante en la sesión, sostuvo que si bien los ucranianos desean la paz, en este momento necesitan mucho más que la esperanza.
“Necesitamos acciones rápidas, concretas y resueltas”, acordes con el nivel de amenaza del “curso agresivo de Rusia”, dijo y afirmó que el mandatario ruso le está negando a Ucrania el derecho a existir y que ha atacado los principios fundamentales de la paz y la seguridad delineados por la ONU.
“Esperamos que la comunidad internacional haga todo lo posible para apagar el fuego que está a punto de estallar en el centro de Europa”, apeló Kuleba.
Territorios perdidos
En su turno al podio, el embajador de Rusia argumentó que Donetsk y Luhansk no son territorios ocupados temporalmente, sino que son territorios perdidos como resultado de la política misantrópica de Ucrania.
Vasiliy Nebenzya aseveró que el gobierno de Kiev incita a la violencia a los habitantes ambas regiones, mientras continúa armándose y bombardeando zonas pacíficas.
Adelantó que Rusia seguirá monitoreando el alto el fuego a petición de Donetsk y Lugansk y que sus fuerzas armadas no tolerarán a los infractores.
“Por lo tanto, los conmino a que concentren sus esfuerzos en calmar a Kiev y evitar nuevas aventuras militares que podrían costarle muy caro a toda Ucrania”, dijo el diplomático ruso a los miembros de la Asamblea.
