
El estadio Metropolitano de Barranquilla se convirtió en el epicentro de la música latina con el regreso de Shakira a su ciudad natal. La cantante ofreció el primer concierto de su gira en Colombia ante miles de fanáticos que la esperaron durante horas en las inmediaciones del recinto. Desde tempranas horas, largas filas de asistentes soportaron una temperatura de 37 grados para garantizar su acceso al espectáculo.
La llegada de Shakira generó un ambiente de celebración en toda la ciudad. Los buses del sistema de transporte masivo Transmetro se unieron a la emoción con mensajes en sus pantallas que decían: “Shak está en casa”, reflejando el orgullo de los barranquilleros. Mientras tanto, los músicos y bailarinas que acompañan a la artista aprovecharon su visita para recorrer puntos icónicos de la ciudad, como la estatua en honor a la cantante, además de degustar platos típicos como la arepa de huevo y el raspao.
El evento, que contó con estrictos controles de seguridad, tuvo siete accesos habilitados para facilitar el ingreso del público. La apertura de puertas se realizó a las 6:00 de la tarde, y la barranquillera subió al escenario a las 10:00 de la noche, desatando la euforia de sus seguidores.