Esta mañana, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció a través de su cuenta en X (antes twitter) su decisión de renunciar a la candidatura para la presidencia para un período más.
“Si bien mi intención ha sido buscar la reelección, creo que lo mejor para mi partido y mi país es que me retire y me concentre únicamente en cumplir mis deberes como presidente durante el resto de mi mandato”, escribió Biden en su mensaje.
Poco después, el presidente publicó un segundo tuit en el que anuncia su apoyo a la candidatura de Kamala Harris, su vicepresidenta.
“Mi primera decisión como candidato del partido en 2020 fue elegir a Kamala Harris como mi vicepresidenta. Y ha sido la mejor decisión que he tomado. Hoy quiero ofrecer todo mi apoyo y respaldo para que Kamala sea la candidata de nuestro partido este año. Demócratas: es hora de unirse y vencer a Trump. Hagámoslo”, escribió.
“Me dirigiré a la nación esta próxima semana para dar más detalles sobre mi decisión”, añadió en el texto, que además señaló que “Ha sido el mayor honor de mi vida servir como su presidente”.
Biden renunció a sus aspiraciones de reelegirse luego de que altos funcionarios de su partido, en público y en privado, le pidieran que considerara hacerse a un lado preocupados por su edad y su capacidad para ser un candidato efectivo.
Aunque los llamados a que dejara paso a otro candidato se desataron tras su muy pobre actuación en el debate con Trump del pasado 27 de junio, cuando se le vio con poca energía y con dificultades para articular sus ideas ante las acusaciones del ya candidato republicano.
La confirmación de la noticia se produce con Biden fuera de la luz pública por su contagio de covid-19 y poco después de que finalizó la Convención Nacional Republicana que encumbró al expresidente como candidato del Partido Republicano por tercera vez consecutiva.