El ministro de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard Casaubón, anunció que el presidente de Perú, Pedro Castillo, realizó una la solicitud de asilo político al Gobierno mexicano este 8 de diciembre.
“El Embajador (de México en Perú) Pablo Monroy me reporta desde Lima que pudo entrevistarse con Pedro Castillo en el Centro Penitenciario. Lo encontró bien físicamente y en compañía de su abogado”, señaló Ebrard Casaubón.
El abogado de Pedro Castillo, Víctor Gilbert Pérez, envió una carta al presidente de México, en el que solicita “considerar otorgar asilo al ciudadano Pedro José Castillo Terrones, frente a la persecución infundada de órganos de justicia que han tomado un carácter político en sus actuaciones respecto a esa persona, a tal extremo que pretenden procesarlo por meros anuncios de voluntad o intención que no configuran ningún delito penal”.
El ex presidente peruano se encuentra detenido desde la tarde del 7 de diciembre de 2022, en la sede de la División Nacional de Operaciones Especiales (DINOES), acusado del presunto delito de rebelión o conspiración. Un día después, el Poder Judicial de Perú decidió imponer siete días de detención preliminar contra el ex mandatario, hasta el 13 del mismo mes y año.
El abogado Pérez Liendo rechazó la acusación de rebelión durante la audiencia, argumentando que tal acto implica el uso de armas y violencia, lo que dijo que nunca ocurrió. Castillo asistió a la diligencia judicial por teleconferencia y se le preguntó si quería dirigirse al tribunal, pero guardó silencio.
El presidente de México Andrés Manuel López Obrador reveló, el 8 de diciembre de 2022, que su ex homólogo de Perú, Pedro Castillo, lo llamó a su oficina para pedirle asilo en México. Sin embargo, fue detenido antes de llegar a la Embajada mexicana en Lima.
“Ayer que pasaron estos hechos pues yo lo que imagino es que ya tenían todo para destituirlo. Imagínense el precepto legal: ‘incapacidad moral’, está en la Constitución y cuando, me imagino, él siente que lo van a destituir pues toma una decisión de desaparecer el Congreso lo que precipitó su destitución”, indicó el mandatario mexicano.
“Habló aquí a la oficina para que me avisaran de que iba hacia la Embajada y que iba a solicitar el asilo, que si le abrían la puerta, pero seguramente ya tenían intervenido su teléfono, Busqué a Marcelo Ebrard y le informé y le dije que hablara con el embajador y le abrieran la puerta, con asilo, pero al poco tiempo tomaron la Embajada, con policías y también ciudadanos”, explicó López Obrador.
