Se produjo un motín en un penal en Ciudad Juárez, de México, que ha dejado un saldo de al menos 14 fallecidos, entre prisioneros y custodios, así como la fuga de 30 reos.
De acuerdo con los informes, el motín inició con una balacera en plena visita por la celebración del Año Nuevo que le costaría la vida a 10 custodios y cuatro reos del Centro de Readaptación Social (Cereso).
Según el grupo militar en la zona, un comando armado, a bordo de seis camionetas, llegaron hasta el penal, donde ya había visita esperando ingresar para ver a sus internos y abrieron fuego, para después entrar y extraer a varios internos.
El motín tuvo como consecuencia que las algunas partes del penal fueran destruidas, se afectaron instalaciones de la luz, hubo fugas de gas y dichas acciones tuvieron que controlarse para evitar daños mayores, lo que provocó que los datos sobre el número de personas que escaparon variaran, señaló Duarte.
Durante las acciones se registró la fuga de por lo menos dos presuntos cabecillas de los Mexicles, un hombre identificado como Ernesto Alfredo Piñón de la Cruz, alias El Neto, y otro individuo apodado El Chilín, quien sería su principal subalterno.
Respecto a la cantidad de personas que escaparon y la cual ha variado desde que se dio a conocer la fuga, el fiscal Roberto Fierro Duarte indicó que las cifras comenzaron a variar en parte porque algunos reos aprovecharon de la confusión y se escondieron en otros módulos.
Al interior del penal fueron hallados diversos artículos que no son permitidos en el interior del penal, como armas de fuego, dinero en efectivo y celulares.
Además de dicho material había 285 bolsas de cristal, 38 dosis de cocaína, 68 de marihuana, 69 de heroína, ocho pastillas de fentanilo y otras 50 dosis con cristal. En total fueron más de 20 kilogramos de diversas drogas.