Estados Unidos enviará 200 soldados a supervisar la implementación del acuerdo de paz entre Israel y Hamas

El Ejército de Estados Unidos desplegará 200 soldados como parte de una misión internacional destinada a supervisar las labores humanitarias y la implementación de la primera fase del reciente acuerdo de paz entre Israel y Hamas, firmado este miércoles bajo mediación internacional.

El despliegue de estos efectivos forma parte de un equipo conjunto que incluirá a representantes militares de Egipto, Turquía, Qatar y Emiratos Árabes Unidos, así como a organizaciones no gubernamentales y actores del sector privado.

Las tropas estadounidenses tendrán como tarea principal el apoyo y la observación del cumplimiento de la seguridad durante la tregua en la región, destacaron funcionarios de Washington el jueves.

Según informó el Comando Central de Estados Unidos (CENTCOM), los efectivos establecerán un “centro de coordinación civil-militar” en territorio israelí y palestino, pero no tienen previsto ingresar en la Franja de Gaza.

Funcionarios, que hablaron con la agencia AP bajo condición de anonimato para discutir detalles cuya divulgación no estaba autorizada, afirmaron que la función del centro será facilitar el flujo de ayuda humanitaria, así como la asistencia logística y de seguridad en el territorio palestino. Y señalaron que las tropas ya han empezado a llegar a la región y continuarán desplazándose durante el fin de semana para iniciar la planificación y el establecimiento del centro.

El oficial al mando de la misión estadounidense será el almirante Bradley Cooper, quien liderará a un contingente dotado de experiencia en transporte, planificación, seguridad, logística e ingeniería. Según fuentes consultados por agencias de noticias, la misión también prevé compartir los planes de seguridad desarrollados por el propio CENTCOM con las autoridades israelíes, en busca de garantizar la colaboración y evitar incidentes en el terreno compartido.

El acuerdo de paz rubricado esta semana contempla la liberación de rehenes, la tregua inmediata y el inicio de un proceso gradual de desescalada de hostilidades en Gaza. Además, prevé la creación de mecanismos multilaterales para la supervisión, con el objetivo de evitar acciones ofensivas por cualquiera de las partes involucradas y sentar las bases de negociaciones a largo plazo para una solución más amplia y estable en Oriente Medio.

Uno de los funcionarios estadounidenses explicó que el nuevo equipo contribuirá al monitoreo de la implementación del alto el fuego y acompañará la transición hacia un eventual gobierno civil en Gaza. Aunque la ubicación exacta de los militares estadounidenses aún no ha sido determinada, la intención es que el centro de coordinación interactúe con fuerzas de seguridad internacionales y con las Fuerzas de Defensa de Israel para evitar cualquier tipo de confrontación.

El proceso acordado plantea cuestiones abiertas sobre el futuro del territorio palestino, como la disposición de Hamas a deponer las armas, el eventual retiro de tropas israelíes y la composición del gobierno en la Franja de Gaza.

Los funcionarios estadounidenses manifestaron que el objetivo de este despliegue, además de estabilizar la zona, es crear condiciones propicias para futuras negociaciones que amplíen la normalización de relaciones entre Israel y países árabes, citando antecedentes como los Acuerdos de Abraham impulsados por la administración de Donald Trump. Entre los posibles candidatos mencionados para futuras aproximaciones diplomáticas figuran Arabia Saudita, Indonesia, Mauritania, Argelia, Siria y Líbano, según las fuentes.

Las fuerzas participantes y la estructura del despliegue evolucionarán conforme avance la implementación del acuerdo de paz y se definan los siguientes pasos acordados por las partes involucradas.