El Barcelona se adelantó y puso un pie en la final de la Copa del Rey al ganar 1-0 en su visita al Real Madrid, en la ida de semifinales del torneo.
Un gol en propia puerta de Eder Militao al minuto 26 bastó al Barça para ir adelante hacia la vuelta en el Camp Nou, el próximo 5 de abril, tras un gran ejercicio de resistencia en el Santiago Bernabéu.
El Real Madrid prácticamente encerró a los azulgranas, que privados de balón trataron de superar a los locales con contraataques y balones largos.
Los merengues volcaron su ataque por la izquierda por donde aparecía Vinicius, protagonista de una intensa lucha a lo largo de todo el partido con el uruguayo Ronald Araujo, para poner balones al área.
Al cuarto de hora, Karim Benzema vio anulado un gol por fuera de juego (13), antes de probar suerte con otro tiro desviado por la defensa a córner (15).
El capitán del Real Madrid no tuvo su mejor noche, muy vigilado por los centrales azulgranas, que cortaron varios pases que buscaban al francés.
En medio del dominio blanco, una mala entrega de Eduardo Camavinga acabó con un disparo de Franck Kessié que sacó Thibaut Courtois con el pie, con la mala suerte de que el rebote dio en Militao colándose en la portería blanca (26).