El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) informó este martes de la detención de un fugitivo ecuatoriano que figuraba en una lista que incluía a los 100 delincuentes más buscados de Ecuador.
Se trata de César Cóndor Vaca, de 29 años, quien era buscado desde septiembre de 2021 por las autoridades de su país por la muerte de su esposa, ocurrida en mayo de 2019.
El arresto tuvo lugar algunos días atrás, el 30 de enero, en Greenville, Carolina del Sur.
El ICE emitió un comunicado en el que mencionó que el Gobierno ecuatoriano había dado aviso a las autoridades de Estados Unidos de que Cóndor Vaca era un sujeto buscado en el país en el marco de un femicidio. Desde entonces, los agentes de la Oficina de Detención y Deportación (ERO) del ICE emprendieron una investigación que les permitió verificar que, efectivamente, Vaca había ingresado al país de manera legal el 15 de marzo de 2021.
Sin embargo, el delincuente no había salido en la fecha que le había sido señalada por las autoridades de inmigración.
Sean Ervin, director de la oficina local de la ERO en Atlanta, señaló que “los fugitivos extranjeros que huyen de la persecución penal en su país de origen no encontrarán un refugio seguro en Estados Unidos”.
“Nuestros oficiales de inmigración trabajan en estrecha colaboración con sus contrapartes estables y locales y están especialmente capacitados para rastrear fugitivos extranjeros presentes ilegalmente para repatriarlos a su país de origen para enfrentar a la Justicia por los delitos que presuntamente cometieron”, agregó.
Por el momento, Cóndor Vaca permanecerá bajo la custodia del ICE a la espera de que se concrete el pedido de deportación.
Durante el 2022, ERO logró exitosamente el arresto de 46.396 extranjeros con antecedentes penales que, en su conjunto, sumaban 198.498 cargos y condenas.
El último año, el país latinoamericano registró una cifra alarmantemente alta de femicidios. Según la Alianza Feminista para el Mapeo de Femicidios, sólo en 2022 fueron 322 los crímenes contra las mujeres en el país, la cifra más alta registrada desde 2014. Esto representa una mujer asesinada cada 26 horas.