Desestimaron demanda contra Meta y Mark Zuckerberg sobre seguridad infantil

Meta Platforms y su CEO, Mark Zuckerberg, obtuvieron una victoria legal tras la desestimación de una demanda que alegaba una falta de divulgación adecuada sobre la seguridad infantil en las aplicaciones de redes sociales Facebook e Instagram. El juez de distrito de Estados Unidos, Charles Breyer, en San Francisco dictaminó el martes que el demandante, Matt Eisner, no logró demostrar pérdidas económicas derivadas de las supuestas divulgaciones insuficientes de la compañía.

En la audiencia, Breyer expresó que Meta no violó ninguna ley federal de valores, ya que no estaba obligada a detallar la severidad del contenido sexualmente explícito ni la explotación sexual de menores en sus plataformas. Además, este fallo fue con perjuicio, lo que implica que Eisner no puede volver a demandar a la compañía ni a Zuckerberg.

De haberse decidido a favor del demandante, la acusación habría bloqueado la reunión anual de Meta de 2024 hasta que se modificara la declaración de poder en relación con la seguridad infantil. Además, se habría invalidado los resultados de las elecciones y obligado a la empresa a pagar los honorarios y gastos legales de Eisner. Según The Guardian, el propio juez comentó que “en esencia, el acusador habría obligado a la empresa a argumentar en contra de sus propias recomendaciones”.

Las demandas contra Meta no acaban

A pesar de este fallo, la compañía de redes sociales aún enfrenta múltiples demandas por parte de fiscales generales estatales que la acusan de causar adicción en los niños a sus aplicaciones. Estas denuncias no son exclusivas de la empresa, ya que los operadores de TikTok, Snapchat y otras más enfrentan cientos de procesos legales similares.

El debate sobre la seguridad infantil y las redes sociales continúa siendo un tema candente. TipRanks destacó que el juez Breyer había rechazado en junio una petición para bloquear la reunión de accionistas, argumentando que muchas de las garantías de Meta en su declaración de poder eran simplemente “aspiracionales”. Esta referencia destacó la complejidad de las expectativas de los usuarios en comparación con las declaraciones formales de la empresa.