Lo que debería haber sido una fiesta de fútbol, colorido, entretenimiento y diversión para los asistentes, pudo haber sido una tragedia de magnitudes inimaginables que las autoridades y organizadores de la final de la Copa América USA 2024 permitieron y pusieron en riesgo la vida y seguridad de los miles de asistentes que abarrotaron el recinto del Hard rock Stadium en Miami.
Desde el miércoles en que se sabía que Colombia y Argentina serían los rivales para la final, las entradas estaban agotadas y además alcanzaron precios insospechados en las páginas que se dedican a este negocio, llegando a costar desde $2,500 hasta los 15,000 por ticket haciendo predecible desmanes, caos e incertidumbre por conseguir el ingreso a la justa deportiva.
Hubo agentes policiales que abusando de su autoridad ingresaban a sus familiares o amigos por el ingreso designado a la prensa a quienes se les negaba el ingreso, la seguridad del recinto se preocupo mas en hacer que la prensa no grabe o capture las incidencias del caos que ocurría, mientras los hinchas no podian ingresar al estadio hasta pasadas las 6.30 pm.
Es decir los asistentes que tenían sus entradas no podía hacer su ingreso mientras la seguridad y policía se confabularon para que ingresen amistades y otros y también el público que no tenia entradas hacen cargamonton e ingresaban a la fuerza al recinto convirtiendo el recinto en un circo criminal con riesgo para las personas al acceder al lugar.
Hubo detenidos en cantidad, gente asfixiándose y con desmayos, hinchas que por tratar de “colarse” al recinto sufrieron accidentes y muchos hinchas que con ticket en mano no pudieron ingresar.
Lo que sí ha sido una voz unánime entre aficionados, hinchas y prensa es que fue una noche de terror para muchos que incluso tuvo que retrasar la hora inicial del encuentro en más de una hora y que pone en atención la seguridad de los estadios de cara a lo que serán los eventos del mundial de clubes 2025 y el mundial de futbol 2026 ambos a realizarse en suelo estadounidense.