Agónico gol selló partidazo: España eliminó a Alemania en su Euro


Pasar de la ilusión a la frustración, del sueño al puñal en el corazón casi sobre la hora, de la euforia a la decepción en 120 minutos. Todo lo ofrecieron los protagonistas del que se anticipaba como un partidazo y al final lo fue.

España venció a Alemania por 1-2 en tiempo de adición, en una auténtica batalla que sacó al anfitrión y favorito del camino, al que se le hizo tarde para buscar su partido en su Euro 2024 y al que le tocó organizar la fiesta para ver a otro celebrar. España sigue adelante. Y el fútbol es justo.  

La señal de lo difícil que era el inicio del partido para Alemania era una falta descalificadora de Kroos, el caballero Kroos, contra Pedri que lo sacó del partido a los 7 minutos de juego, una acción que increíblemente no mereció ni amarilla.

Y después fue el equipo punzante español habitual, encarando, animándose en un tiro libre de Yamal, en llegadas de Fabián, de Olmo, en las proyecciones de Williams que retrataban la lentitud alemana, cuyo único argumento e la primera media hora fue un cabezazo de Havertz a manos del portero. Lo mejor que le pasaba al local era no encajar gol en el primer tiempo.

En el complemento era más de eso mismo, un dominio español que por poco, a los 47 se convierte en ventaja, de no ser porque Morata no afinó la puntería y mandó el balón muy elevado frente al arco.

Hasta que un acto de justicia hizo que Olmo, el gran dolor de cabeza de los alemanes y de varios más en esta Euro, apareció pro sorpresa tras superar a Kroos y en soledad metió un remate muy pegado al palo, imposible para Neuer, para el 1-0 que premiaba al que más propuso. 

Pero era Alemania, y estaba ente su gente, y entraba Füllkrug y eso siempre es una señal de alerta y era él, justamente, quien generaba la más clara ocasión de gol del local a los 76 minutos, al estrellar la pelota en el palo en un duro mano a mano con Carvajal, casi cayéndose, a pura lucha.

Se habían ido ya los picantes Williams y Yamal y también Morata para cuidar el resultado y en cambio Alemania tiraba al campo a Müller, a Writz, a Mittelstädt y todo lo que tenía para buscar la igualdad, la que por centímetros desperdició Havertz cuando le metió un globo a Unai Simón que no le bajó a tiempo sobre los 80 minutos. 

Se acordó tarde de atacar Alemania, tan ocupado en contener a España, pero la apuesta defensiva para cerrar castigaba a Luis de la Fuente cuando, a puro corazón, apareció Kimmich en el área para bajarle la pelota al chico Wirtz, quien remató impecable, haciéndola picar antes de meterse al arco de Unai Simón para el 1-1, ¡a los 89 minutos! 

Al alargue parecía ir más fuerte Alemania, pero España tiene mucho potencial y también podía inquietar. Lo tenía Oyarzabal a los 103 en un remate apenas abierto y le respondía Wirtz a los 105 en otro lindo remate cruzado, demasiado cruzado, mientras a los 116 lo tenía Füllkrug ante el delirio de sus compatriotas. Se sucedían las faltas y parecía que ya todos firmaban la definición desde los once pasos, que a la postre no se dio por culpa de Merino, quien sorprendió a todos con un fantástico centro de Olmo y mejor cabezazo del recién llegado, cuando faltaba solo un minuto de juego en el alargue. Se fue expulsado Carvajal sobre el cierre y no pasó nada más.

Agotados todos, el reloj castigó a una Alemania que soñó pero decepcionó a su gente… Una vez más. Para España todo el honor, la justicia de haber sido mejor y tener la ocasión de pelear un título continental con una generación de lujo