Los demócratas en el Senado de Estados Unidos lanzaron el miércoles por la noche un esfuerzo para cambiar la regla obstruccionista de la cámara, luego de que los republicanos la usaran para bloquear la legislación solicitada por el presidente Joe Biden para ampliar los derechos de voto.
El muro republicano de oposición, por quinta vez en menos de un año, asestó un nuevo golpe a la agenda interna de Biden apenas unos meses antes de las elecciones legislativas del 8 de noviembre. Un importante proyecto de ley para ampliar la inversión en programas sociales nacionales ya languidecía en el Congreso.
Los demócratas no alcanzaron los 60 votos que necesitaban para superar un obstáculo legislativo conocido como obstruccionismo que requiere al menos 60 votos en el Senado de 100 miembros para avanzar en la legislación.
Pero dos días de enérgico debate sobre el avance del amplio proyecto de ley destinado a mejorar la participación de los votantes en las elecciones estadounidenses culminaron con una mayoría de senadores sentados en sus escaños escuchando atentamente los argumentos finales.
“¿Cómo podemos lograr un consenso real sobre los temas que más importan si solo se puede escuchar a algunos votantes?”, dijo el senador demócrata Raphael Warnock en una súplica a los republicanos.
Los demócratas instaron a la aprobación de un proyecto de ley que, según dijeron, fortalecería una democracia azotada por los conflictos internos y los violentos disturbios del 6 de enero de 2021 en el Capitolio de los Estados Unidos a manos de miles de partidarios del entonces presidente Donald Trump. Los alborotadores intentaban detener una certificación del Congreso de la victoria de Biden en 2020 contra Trump.
Subrayando las profundas divisiones en el Congreso y en todo el país, los republicanos respondieron que los demócratas habían inventado una crisis sobre los derechos de voto y sostuvieron que se necesitaba hacer poco o nada con la forma en que los estados administran las elecciones.
La cuenta final sobre la limitación del debate sobre un proyecto de ley de reforma electoral que los demócratas dicen que es necesario para preservar el derecho al voto en los Estados Unidos fue 49-51. Ningún republicano votó para promover la legislación.
Luego, el Senado inició un segundo debate, uno en el que los demócratas pidieron reducir la regla obstruccionista de décadas de antigüedad de la cámara solo para este proyecto de ley de derechos de voto. El cambio fue diseñado para eludir la oposición republicana y allanar el camino para promulgar el proyecto de ley de derechos electorales con una mayoría simple de votos demócratas.
También se esperaba que esto fracasara porque los republicanos y un pequeño número de demócratas se oponían.
“¿Vamos a dejar que nuestra democracia retroceda en el siglo XXI?” El líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, preguntó cuando comenzó el debate sobre el cambio de reglas. “A todos los que creen que esta cámara aún es capaz de defender la democracia en su hora de gran necesidad, les pido que voten a favor”, agregó.
NUEVAS LEYES ESTATALES
El año pasado, varias legislaturas estatales controladas por republicanos, impulsadas por las falsas afirmaciones de Trump sobre un fraude electoral generalizado, aprobaron leyes que los demócratas temen que desalienten la votación, especialmente en áreas con grandes bloques de personas negras, hispanas y pobres que forman parte del núcleo de los partidarios demócratas. .
Pero el senador demócrata conservador Joe Manchin defendió enérgicamente su oposición a cambiar la regla obstruccionista, a pesar de que apoya la legislación sobre el derecho al voto en sí. Se necesitaría su voto para anular la regla.
“Que este cambio suceda de esta manera y el Senado será un organismo sin reglas”, dijo Manchin. “No tenemos que cambiar las reglas para presentar nuestro caso ante el pueblo estadounidense a favor del derecho al voto”.
Biden dijo en una conferencia de prensa el miércoles que no había perdido la esperanza de promover los derechos de voto.
“Todavía no nos hemos quedado sin opciones”, dijo Biden.
Con el Senado dividido 50-50, los demócratas necesitarían el apoyo de todos los miembros de su caucus más un voto de desempate de la vicepresidenta Kamala Harris para cambiar las reglas de la cámara sobre el obstruccionismo. La compañera demócrata conservadora de Manchin, Kyrsten Sinema, también se opone a cambiar la regla.
Sin embargo, Manchin abrió la puerta para respaldar una legislación electoral más limitada, incluida la provisión de fondos federales para proteger a los trabajadores electorales estatales no partidistas contra las amenazas violentas contra ellos que se han intensificado durante el último año.
El líder de la minoría del Senado, Mitch McConnell, el principal republicano de la cámara, advirtió a los demócratas que no revisen la regla de obstruccionismo en la legislación. “El miedo es falso, la ira está fuera de lugar y hoy las fiebres entre facciones no triunfarán”, dijo McConnell.
Entre las prácticas que los demócratas quieren convertir en estándares mínimos de votación federal están la oportunidad de que cualquier votante registrado solicite una boleta por correo, al menos dos semanas de votación anticipada y urnas que hacen que votar sea más conveniente en muchas áreas.
La legislación de los demócratas también intentaría eliminar el partidismo en la forma en que se rediseñan los distritos electorales cada década. En la actualidad, el “gerrymandering” inclina regularmente el campo a cualquier partido que esté en el poder en los distintos estados.
